Taboo se reinventa con cuatro sabores nuevos
El fabricante de tabaco para cachimba, Taboo, ha lanzado cuatro nuevos sabores para completar su amplio portfolio de referencias: French Kiss, Hajuna Matata, Moonwalk y Mystic China. Asimismo, las nuevas mezclas llegarán a los estancos durante este mes y de manera escalonada, de la mano de la distribuidora Aldista.
Taboo quiere hacerse con el liderazgo del mercado de tabacos, y su estrategia pasa por reinventar sus mezclas para llegar a casi todos los segmentos de consumidores. En esta ocasión las combinaciones son para fumadores que busquen tabacos refrescantes o de tipo dulce para degustar como postre.
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En cuanto a la gama, French Kiss apuesta por una combinación clásica, uva y menta, sencilla y refrescante para los paladares más clásicos, en cambio Moonwalk busca una reacción más intensa con un choque cítrico y ligeramente amargo de su mezcla entre Sprite y tónica. Por su parte, Hakuna Matata regala al consumidor una experiencia dulce y sabrosa gracias al equilibrio entre el plátano y el caramelo, y para concluir: Mystic China, una gama tradicional con sabor a lichi.
Por último, el tabaco llegará a los estancos de manera escalonada a lo largo de este mes y de la mano de Aldista.
Taboo Hakuna Matata
Taboo Hakuna Matata sigue reinventándose y apostando por mezclas capaces de sorprender por las sesiones que regala al aficionado. El plátano y el caramelo pueden ser una apuesta arriesgada, ya que un desequilibrio entre ambas se convertiría en un desastre de dimensiones empalagosas. Pues bien, la marca ha elaborado un tabaco que regala una fumada dulce, sabrosa y que nos mantiene pegados a la manguera durante más de una hora. Al abrirlo, percibimos un intenso olor dulce a caramelo, que se mantiene en boca durante la primera parte de la fumada. Una vez calentado el tabaco, se muestra capaz de jugar con la relevancia del plátano que se confunde con los matices dulces del caramelo. Esa alternancia en los planos de sabor es la clave para que la mezcla se mantenga equilibrada y ambas esencias tengan un protagonismo de ida y vuelta. El retrogusto que regala es intenso, a plátano dulce, bien balanceado, sin mostrarse empalagoso en ningún momento. Es un tabaco para degustar como postre, de manera relajada e incluso maridarlo con té para tener una cata más completa.
Taboo Moonwalk
Taboo Moonwalk ha unido la esencia de dos refrescos, que bien pueden ser antagónicos, Sprite y tónica, para elaborar un tabaco con un denominador común: el limón. Por un lado, tenemos el sabor del Sprite, bebida refrescante de base dulce con un ligero toque de limón y, por el otro, la tónica, refresco con un toque de limón amargo. Ambas parten de dos conceptos diferentes, pero tienen un punto en común que equilibra la fumada. Cuando abrimos el envase podemos percibir perfectamente el olor de ambos refrescos con una intensidad media-alta que invita a desmenuzar el tabaco y ponerlo para disfrutar de una grata sesión. En boca es muy refrescante, como si incluyera las burbujas de estas bebidas, y también muy completo, puesto que es capaz de ofrecernos tres experiencias al aspirar: dulce, amargo y un remate ácido del limón. El paso de las esencias dulces y amargas activan las zonas de la punta y el final de la lengua, y la ácida por su parte la zona intermedia, por lo que con este tabaco podemos tener una experiencia sensorial muy placentera.
Taboo Mystic China
Taboo Mystic China nos traslada a la región del sudeste asiático, zona originaria de la esencia de este tabaco: el lichi o lychee, una fruta muy carnosa que combina el sabor dulce con matices de cítricos, y cuyo nombre traducido del chino significa “regalo de una vida alegre”. Toda una declaración de intenciones. Cuando abrimos el envase lo primero que percibimos es un olor dulce, parecido al de la fresas y la frambuesa, pero con un reflejo final cítrico que le aporta un toque atrevido pero equilibrado. Una vez lo ponemos en la cazoleta se muestra bastante intenso, como el resto de sabores de la marca, con una resistencia al calor muy buena, sin importar si lo consumimos con gestor de calor o papel de aluminio. La experiencia que regala es muy grata, capaz de recrear el sabor de este fruto de manera fidedigna, sin picos de sabor, con una estabilidad de intensidad que se prolonga durante más de una hora. Sin duda, es una apuesta exótica que para los amantes de la shisha se puede convertir en una opción a tener en cuenta entre los habituales de sus estanterías.
Taboo French Kiss
¿Cómo será un beso francés? Para Taboo French Kiss es muy jugoso, refrescante y con un punto ácido. Con esta mezcla el fabricante ha unido dos esencias de corte tradicional: uva y menta, para llegar a los consumidores que buscan sabores y fumadas clásicas. En cuanto abrimos el envase del tabaco percibimos una uva muy dulce, con una intensidad alta y unas notas ligeras a menta. En la cazoleta debemos esperar unos 20 minutos para que empiece a mostrar toda su intensidad, y la espera merece la pena. Degustamos un tabaco muy jugoso con una uva muy potente, que recuerda con exactitud a la que se usa para combinar con los zumos de piña, con un paso dulce en su inicio y un poco ácido al final. En un segundo plano se encuentra la menta, ofreciendo soporte fresco a la uva sin quitarle protagonismo alguno. Durante más de una hora, se recrea con gran fidelidad y potencia el sabor del jugo de la uva con un cierto dinamismo y equilibrio entre los matices dulces y ácidos. Un tabaco que puede ser un buen compañero para el verano.